Sobredosis de aspirina
Una sobredosis de aspirina puede ser peligrosa y potencialmente mortal. La aspirina es un medicamento que puede tener efectos adversos graves si se toma en cantidades excesivas. Los síntomas de una sobredosis de aspirina pueden variar, pero algunos de los signos más comunes incluyen:
- Náuseas y vómitos: La sobredosis de aspirina puede causar náuseas y vómitos intensos.
- Dolor abdominal: Puedes experimentar dolor abdominal intenso y cólicos.
- Confusión y agitación: La sobredosis de aspirina puede afectar el sistema nervioso central, lo que puede llevar a la confusión, agitación, desorientación y otros cambios en el estado mental.
- Respiración rápida y superficial: La aspirina en grandes cantidades puede afectar la función respiratoria, resultando en una respiración rápida y superficial.
- Zumbido en los oídos (tinnitus): El tinnitus, o zumbido en los oídos, es un síntoma común de una sobredosis de aspirina.
- Sudoración excesiva: Puedes sudar más de lo habitual, incluso si no estás realizando actividades físicas.
- Convulsiones: En casos graves de sobredosis, pueden ocurrir convulsiones y otros trastornos neurológicos.
- Coma y fallo orgánico: En los casos más graves, una sobredosis de aspirina puede llevar al coma y al fallo orgánico, lo que representa una amenaza para la vida.
Si sospechas que has tomado una cantidad excesiva de aspirina o estás experimentando alguno de estos síntomas después de tomar aspirina, es importante buscar atención médica de inmediato. En caso de una sobredosis de aspirina, los profesionales de la salud pueden administrar tratamiento para reducir la absorción de la aspirina, corregir los desequilibrios electrolíticos y proporcionar otros cuidados de apoyo según sea necesario.
Para prevenir una sobredosis de aspirina, es esencial seguir las indicaciones de dosificación recomendadas por un médico o profesional de la salud y nunca exceder la dosis prescrita. Siempre es recomendable hablar con un profesional de la salud antes de tomar cualquier medicamento, incluida la aspirina, y seguir las instrucciones cuidadosamente.
Tomar más de 150 mg/kg de aspirina puede provocar resultados graves e incluso mortales si no se recibe tratamiento.
Para un adulto pequeño, eso equivale aproximadamente a tomar 20 tabletas que contienen 325 mg de aspirina. Los niños pueden resultar afectados con niveles mucho más bajos.
Los pacientes con una sobredosis accidental o intencional de aspirina son sometidos a un lavado gástrico con carbón activado y se instala una producción abundante de orina alcalina.
De presentar trastornos como hipertermia o desequilibrios en los electrolitos, deben ser restablecidos.
En las intoxicaciones severas, puede que sea necesaria la hemodiálisis o, rara vez, la ventilación asistida.
A menudo se emplean infusiones de bicarbonato de sodio para alcalinizar la orina conllevando a un aumento en el salicilato excretado fuera del cuerpo.