¿Qué seguros son obligatorios?
La ley suele establecer determinados seguros con carácter obligatorio. Ejemplos de seguros obligatorios por ley son los siguientes:
- Seguro obligatorio de vehículos, que es un seguro básico del ramo más amplio del seguro del automóvil. Es de obligatoria suscripción gracias al Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre;
- Seguro de perros considerados peligrosos;
- Seguros deportivos: Cubren las actividades deportivas, entrenamientos y competencias, desarrolladas bajo la supervisión y/o autorización de la institución por la cual fue contratada la cobertura y durante la vigencia señalada en la póliza;
- Seguro de caza: La mínima cobertura que puede conseguir es la póliza de responsabilidad civil del cazador que cubre los daños involuntarios que pudiese ocasionarle a otros durante la actividad de la caza.
- Seguro de buceo: La mayoría incluyen rehabilitación, asistencia quirúrgica, medicación, gastos así como los de prótesis o similares. Algunas pólizas establecen una profundidad máxima a la que puede descender el asegurado.
- Seguro de bicicleta: seguro deportivo no obligatorio; seguro de responsabilidad civil; para obtenerlo, es necesario afiliarse a la entidad y registrar la bicicleta;
- Seguro de esquí: seguro deportivo no obligatorio; mínimo seguro de responsabilidad civil;
- Seguros de quad: un quad necesita contar con un seguro de responsabilidad civil obligatoria para circular;
- Seguro de daños materiales o de caución: los poderes públicos entienden que la peligrosidad de ciertas actividades es suficiente para obligar a quien las efectúa a contratar un seguro que proteja a terceras personas de los daños que se puedan causar.
Otros contratos pueden venir obligados por un contrato anterior. Es muy habitual en una hipoteca tener que asegurar el bien hipotecado a favor del acreedor.
¿Qué seguros son obligatorios en España?
En España, existen varios seguros obligatorios que las personas y las empresas deben tener para cumplir con las leyes y regulaciones locales. Estos seguros están diseñados para proteger a las personas, los bienes y la responsabilidad en diferentes situaciones. Algunos de los seguros obligatorios más comunes en España son:
- Seguro de Automóvil (Seguro de Responsabilidad Civil de Vehículos a Motor): Todos los propietarios de vehículos a motor en España están obligados a tener un seguro de automóvil que cubra la responsabilidad civil por daños a terceros en caso de un accidente de tráfico.
- Seguro de Hogar (Seguro Multirriesgo del Hogar): Si tienes una hipoteca sobre tu vivienda, es probable que el banco te exija tener un seguro de hogar que cubra daños estructurales y contenido en caso de incendio, inundación y otros riesgos.
- Seguro de Responsabilidad Civil para Propietarios de Perros Potencialmente Peligrosos: Los dueños de perros considerados potencialmente peligrosos están obligados a tener un seguro de responsabilidad civil que cubra daños que el perro pueda causar a terceros.
- Seguro de Responsabilidad Civil para Caza y Pesca: Los cazadores y pescadores están obligados a tener un seguro de responsabilidad civil que cubra los daños que puedan surgir de sus actividades.
- Seguro de Responsabilidad Civil para Actividades Empresariales: Las empresas pueden estar obligadas a tener seguros de responsabilidad civil para cubrir posibles daños a terceros en el curso de sus operaciones.
- Seguro de Responsabilidad Civil para Profesionales: Algunas profesiones reguladas, como médicos, abogados, arquitectos y otros profesionales, pueden requerir seguros de responsabilidad civil para cubrir posibles errores o negligencias en su trabajo.
- Seguro de Accidentes para Empleados: Los empleadores están obligados a proporcionar seguros de accidentes para sus empleados que cubran lesiones sufridas en el lugar de trabajo.
Estos son solo algunos ejemplos de los seguros obligatorios en España. Es importante consultar con un asesor de seguros o experto legal para determinar qué seguros específicos son necesarios según tu situación y actividades. Las leyes y regulaciones pueden cambiar con el tiempo, por lo que es esencial mantenerse informado y cumplir con los requisitos legales correspondientes.