Lorazepam y Diazepam: ¿cómo funcionan?
Diazepam y Lorazepam son dos principios activos que pertenecen a la familia de las benzodiacepinas. Se trata de medicamentos que tienen efecto ansiolítico, hipnótico, anticonvulsivante y relajante muscular, fundamentalmente. Estos efectos los consiguen gracias a su mecanismo de acción, que consiste en ser moduladores alostéricos del receptor GABA. Concretamente, las benzodiacepinas se unen a la subunidad alfa del receptor GABA, permitiendo la entrada del anión cloro dentro de la neurona. La consecuencia de la entrada de cloro dentro de la célula es un inhibición de la misma, por tanto, se dice que las benzodiacepinas son depresores del sistema nervioso central. El hecho de que sean moduladores alostéricos hace que el canal de cloro solo se abra en presencia del neurotransmisor GABA, lo cual hace a las benzodiacepinas mucho más seguras en sobredosis que los barbitúricos.
Tanto Lorazepam como Diazepam logran un beneficio terapéutico sobre la ansiedad inhibiendo la actividad neuronal en los circuitos del miedo localizados en la amígdala. El efecto anticonvulsivo lo consiguen inhibiendo las neuronas de la corteza cerebral.