Contraindicaciones de la aspirina
Las contraindicaciones son situaciones o condiciones médicas en las cuales el uso de un medicamento, como la aspirina, está desaconsejado debido al riesgo potencial para la salud. Aquí hay algunas contraindicaciones importantes a considerar antes de tomar aspirina:
- Alergia a la aspirina o a los AINE: Si tienes una alergia conocida a la aspirina o a otros medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE), debes evitar tomar aspirina, ya que existe un riesgo de reacción alérgica.
- Úlceras gástricas o hemorragia activa: Si tienes úlceras estomacales o intestinales, o si tienes una hemorragia activa en el tracto gastrointestinal, el uso de aspirina está contraindicado, ya que puede empeorar estas condiciones y aumentar el riesgo de sangrado.
- Trastornos de la coagulación: Si tienes trastornos de la coagulación, como hemofilia u otros problemas de sangrado, debes evitar la aspirina, ya que puede aumentar el riesgo de hemorragias.
- Síndrome de Reye en niños: La aspirina no debe administrarse a niños y adolescentes con síntomas de infecciones virales, ya que existe un riesgo de desarrollar el síndrome de Reye, una afección grave que afecta el cerebro y el hígado.
- Asma y problemas respiratorios: En algunas personas con asma o enfermedades respiratorias, la aspirina puede desencadenar un empeoramiento de los síntomas, como broncoespasmo y dificultad para respirar.
- Insuficiencia renal severa: Si tienes insuficiencia renal severa, es importante consultar a un médico antes de tomar aspirina, ya que puede afectar la función renal.
- Embarazo y lactancia: Si estás embarazada o en período de lactancia, es recomendable consultar a un médico antes de tomar aspirina, ya que su seguridad en estas situaciones puede variar según la dosis y el contexto clínico.
- Uso combinado con otros medicamentos: La combinación de aspirina con ciertos medicamentos, como anticoagulantes, antiplaquetarios, corticosteroides y otros AINE, puede aumentar el riesgo de efectos secundarios y complicaciones. Es importante consultar a un profesional de la salud antes de combinar aspirina con otros medicamentos.
Siempre es recomendable hablar con un médico o profesional de la salud antes de tomar aspirina, especialmente si tienes alguna condición médica preexistente, estás tomando otros medicamentos o tienes preocupaciones sobre su uso. Tu médico podrá evaluar tu situación individual y determinar si la aspirina es adecuada para ti, considerando tus necesidades médicas y riesgos potenciales.
La acción antiplaquetaria de la aspirina hace que esté contraindicada en pacientes con hemofilia. Aunque en el pasado no se recomendaba el uso de la aspirina durante el embarazo, la aspirina puede tener utilidad en el tratamiento de la preeclampsia e incluso en la eclampsia.
La aspirina no debe administrarse en personas con antecedentes alérgicos al ibuprofeno o al naproxeno, o quienes sean de alguna forma intolerantes a los salicilatos o a los AINE (antiinflamatorios no esteroideos) y se debe ejercer moderación en la prescripción de aspirina a pacientes asmáticos o con broncoespasmo inducida por los AINE. Por motivo de su acción sobre la mucosa estomacal, se recomienda que los pacientes con enfermedad renal, úlceras pépticas, diabetes, gota o gastritis consulten con un profesional de la salud antes de tomar aspirina. Aún en la ausencia de estas enfermedades, siempre existe el riesgo de sangrado gastrointestinal cuando se combina la aspirina con el licor o la warfarina.
Se ha demostrado que la aspirina puede causar anemia hemolítica en pacientes con deficiencia de glucosa-6-fosfato deshidrogenasa (G6PD), en especial a grandes dosis y dependiente de la severidad de la enfermedad.