Prevención para la variante Delta del SARS-CoV-2
La OMS no proporcionó recomendaciones específicas para la variante delta que no hubiese ya descrito para el resto de variantes de la COVID-19, y recordó el resto de medidas que se han mostrado eficaces a la hora de prevenir el virus —higiene de manos, utilización de una mascarilla para cubrir nariz y boca, evitar las aglomeraciones, distancia prudente entre personas, ventilación en espacios cerrados y recibir una vacuna si esta está disponible— resultan igualmente eficaces a la hora de prevenir la enfermedad causada por esta cepa.
Respecto a estas últimas, se han publicado datos que indican que las vacunas convencionales podrían ser efectivas a la hora de evitar la enfermedad grave y la hospitalización. Estudios internos de la Universidad de Texas en conjunto con Pfizer y BioNTech publicados en Nature a principios de 2021 aseguraron que los anticuerpos generados por la vacuna son capaces de controlar todas las variantes analizadas, incluida la delta, aunque con menor efectividad. Un análisis preliminar realizado por Public Health England y publicado en junio de 2021 indicaba que las vacunas de Pfizer-BioNTech y Astra-Zeneca son eficaces en más de un 90% a la hora de prevenir la enfermedad causada por la variante. Posteriormente, otro estudio publicado en la revista científica New England Journal of Medicine afirmó que dos dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech proporcionan un 88% de protección ante la enfermedad sintomática producida por la variante delta, mientras que el mismo número de dosis de la vacuna de AstraZeneca proporcionan un 67% ante esta. Un estudio preliminar realizado en la Universidad de Ontario proporcionó indicios de que una dosis de la vacuna de Moderna para la COVID-19 podría poseer hasta un 72% de eficacia en la prevención de la enfermedad por la variante
Fuente: Wikipedia