Bombillas LED
Las bombillas LED van ganando terreno en nuestras casas. Son las más eficientes, tienen una vida útil de hasta 50.000 horas y consumen un 80% menos que las incandescentes. No generan calor y soportan gran cantidad de ciclos de encendido y apagado. Son la alternativa ideal hoy en día, por su consumo y la cantidad de luz que emiten, pero también son las que tienen un precio más elevado. La luz no se concentra en un único punto, como pasa con la incandescente, y puede llegar a tener unas 50.000 horas de uso, es decir, que multiplica por 50 la vida de sus competidoras.
LED Son las siglas de Light Emitting Diode. Las bombillas LED son las más consecuentes con el medio ambiente, ya que suponen una opción ecológica a la vez que eficiente.
Esto es debido a que no emiten tanto CO2 en el medio ambiente como otros tipos de bombillas, y además no presentan tugsteno ni tampoco mercurio.
Además si analizamos las características principales comentadas anteriormente, la vida útil de los diferentes tipos de bombillas, las bombillas LED podrán usarse alrededor de cincuenta mil horas. El ahorro en cuanto al consumo es más que significativo, ya que estaremos consumiendo alrededor de un 80% menos que cualquier otra bombilla tradicional incandescente.
Bombillas LED: ventajas e inconvenientes
- Ventajas: son las más ecológicas del mercado, ya que no llevan ni tungsteno ni mercurio. Duran unas 50.000 horas (podrías tenerlas encendidas 5 años seguidos) y consumen alrededor de un 80% menos que las incandescentes. Prácticamente no emiten calor. .
- Inconvenientes: su único problema es que, comparadas con el resto, tienen un precio elevado. Aunque a la larga se rentabilizan, supondrá una incomodidad económica cada vez que haya que cambiarlas.
Bombillas Led duración y ahorro
La tecnología LED se ha abierto paso a base de eficiencia y diseño. Sus características la colocan por encima del resto de sistemas lumínicos y por eso estas bombillas empiezan a poblar nuestras casas.
De todos los tipos de bombillas que existen son las LED las que destacan por encima del resto.
Gastan hasta un 80% menos electricidad que las bombillas incandescentes (“las de toda la vida”), no emiten calor y no incluyen componentes contaminantes.
Con la tecnología actual, la revolución LED resulta imparable y ya está transformando con paso firme la iluminación hogares, negocios, vías públicas, electrodomésticos e incluso invernaderos.
“Las bombillas LED son reciclables y, a diferencia de las fluorescentes, no contienen mercurio ni otros contaminantes.”
¿Cuánto dura una bombilla LED?
Las tradicionales bombillas incandescentes forman parte del pasado (su fabricación está prohibida en la Unión Europea). Lo habitual es que aguantasen alrededor de 1.000 horas antes de fundirse.
Las halógenas, que supusieron todo un avance, pueden llegar a las 3.000 horas.
Las bombillas de bajo consumo rompieron la baraja al superar las 15.000 horas de vida útil.
Y entonces llegó la tecnología LED, con bombillas que duran aproximadamente 50.000 horas. Esto equivale a tenerlas encendidas 5 años sin interrupción.
¿Cómo funcionan las bombillas LED?
La tecnología LED está basada en el diodo. De hecho, sus siglas significan Light Emitting Diode (Diodo Emisor de Luz).
El diodo es un componente electrónico de dos puntas que permite la circulación de energía a través de él en un solo sentido. Al ser un semiconductor deja pasar los electrones y crea una radiación electromagnética en forma de luz.
Y como este componente puede variar su intensidad, los LED son capaces de generar una combinación de colores casi infinita.
Origen de las bombillas Led
En 1927 el ruso Oleg Lósev comenzó a experimentar con esta tecnología. Pero su descubrimiento pasó inadvertido durante décadas hasta ser reconocido a finales del siglo XX.
El primer LED con emisión en el espectro visible fue desarrollado en 1962 por la compañía General Electric. Su sistema cambió el paradigma lumínico y fue mejorando hasta que los japoneses Isamu Akasaki y Hiroshi Amano y el estadounidense Shuji Nakamura desarrollaron la bombilla que conocemos hoy en día.
A raíz de sus investigaciones, Nakamura, Akasaki y Amano fueron galardonados con el Premio Nobel de Física 2014.
“El desarrollo de la iluminación LED les valió a sus inventores el Nobel de Física 2014.”
El futuro es bombillas LED
La tecnología LED ya se está implantando en hogares, negocios comercios, la vía pública… Su alta eficiencia energética se nota en cualquier factura y su amplia gama de colores y formas contribuye a la parte decorativa.
Con los LED un espacio cualquiera puede ser reformado totalmente ofreciendo originales efectos lumínicos. Y buena parte de esta responsabilidad la tienen las tiras LED, capaces de iluminar casi cualquier zona por recóndita que sea: escaleras, muebles, escaparates, plantas o estanterías.
Otro sector que tampoco se escapa de la revolución LED es la Administración en general y la iluminación festiva en particular (Navidades, celebraciones locales, etc).
La tecnología LED no solo se aplica en iluminación. Los LED han engullido a las pantallas de cristal líquido (LCR) que durante años monopolizaron las calculadoras, relojes digitales, televisores…
Los LED también han ido sustituyendo gradualmente a las lámparas fluorescentes de las pantallas LCD. Gracias a esto se ha reducido el consumo y el tamaño de los aparatos, incrementándose su resolución e iluminación.
Invernaderos LED más eficientes
Otro sector en el que la tecnología LED se ha introducido con fuerza debido a su alta eficacia es la germinación y florecimiento de las plantas. Lo consiguen gracias a sus diferentes longitudes de onda.
¿Qué quiere decir esto? Que son capaces de regular el color de la luz haciendo que las plantas absorban profundamente las partes del espectro que más necesiten. Por ejemplo, los colores azules y rojos son beneficiosos para producir la fotosíntesis. Mientras que los niveles más concentrados de luz verde promueven el crecimiento.
“Las bombillas LED imitan la luz del sol y ayudan a las plantas a hacer la fotosíntesis, por lo que se están implantando en todos los invernaderos.”
Además, las lámparas LED pueden imitar la luz del sol. Sin embargo, su imitación no es total pues emiten menos calor que las bombillas normales, lo que justifica su ahorro energético, haciendo que las plantas no sean expuestas a temperaturas excesivas durante su desarrollo.
Todo ello acompañado de su mayor longevidad y menor coste energético está haciendo que los agricultores de invernaderos se pasen sin dudarlo a la iluminación LED.
Ahorrar luz con bombillas LED
Tengas o no tengas LED, tu consumo eléctrico va a suponer en torno a la mitad de lo que pagas en la factura.
Lógicamente, cuanto más eficientes sean tus bombillas menos electricidad consumirás. Pero ¿cuánto pagarás por la electricidad que consumas? Existen tarifas en las que puedes elegir algunas horas en las que no pagarás nada. Así podrás elegir las horas en las que más consumes (en las que más usas la lavadora, el horno, el lavavajillas…).