Seguro de coche a todo riesgo


Seguro de coche a todo riesgo

El seguro de coche a todo riesgo, también conocido como seguro de automóvil a todo riesgo o seguro comprensivo, es un tipo de seguro de vehículo que ofrece la cobertura más amplia disponible para proteger tu automóvil.

A diferencia del seguro de coche a terceros, que cubre principalmente daños a terceros (personas y propiedades), el seguro a todo riesgo proporciona una protección más completa tanto para tu propio vehículo como para terceros involucrados en un accidente.

El seguro de coche a todo riesgo generalmente incluye las siguientes coberturas:

  1. Responsabilidad civil: Cubre los daños causados a terceros en caso de accidente, incluyendo lesiones y daños a la propiedad.
  2. Daños propios: Cubre los daños sufridos por tu vehículo en caso de accidente, ya sea por colisión, vuelco, vandalismo, robo, incendio u otros eventos cubiertos.
  3. Robo: Cubre la pérdida o daño causado por el robo de tu automóvil.
  4. Daños por vandalismo: Cubre los daños causados por actos vandálicos en tu vehículo.
  5. Asistencia en carretera: Brinda servicios de asistencia en caso de avería o accidente, como remolque, cambio de neumáticos, suministro de combustible, etc.

Es importante tener en cuenta que, aunque el seguro de coche a todo riesgo ofrece una cobertura amplia, también puede tener un costo más alto en comparación con otros tipos de seguros de automóvil. Además, cada póliza puede tener exclusiones y deducibles específicos, por lo que es fundamental leer y comprender los términos y condiciones de tu contrato de seguro antes de adquirirlo.

El seguro de coche a todo riesgo es la modalidad más interesante para conductores con coches nuevos de alto valor o que se preocupen por el estado de su vehículo y los posibles daños de su conducción. A cambio de una mayor prima de seguros, esta modalidad de seguro completa las coberturas ofrecidas por el seguro a terceros y el terceros ampliado, con la cobertura de daños propios.

Los daños propios son los daños producidos en nuestro propio vehículo y que puedan haber sido ocasionados por nuestra culpa (con exclusiones, por supuesto, como conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas, sin carné, etc.).

Los daños propios pueden ser menores (rayaduras, abolladuras, golpes, bollos, etc.) o realmente graves como el siniestro total del vehículo, por lo cual, el coste de la cobertura puede variar muchísimo.

Seguro de coche a todo riesgo con franquicia

Para evitar encarecer la prima mucho y ofrecer precios de seguros competitivos, las compañías de seguros ofrecen una modalidad del seguro de coche a todo riesgo llamada todo riesgo con franquicia que lo que hace es fijar un umbral económico (franquicia) a la cobertura de daños propios, al que el asegurado se compromete a hacer frente en caso de siniestro. 

En este caso de seguro de coche a todo riesgo, la franquicia la paga la persona asegurada en caso de siniestro y todo lo que exceda la misma y que esté cubierto (daños en nuestro vehículo) correrá a cargo de la aseguradora. Por ejemplo si tenemos un todo riesgo con franquicia de 300 euros y damos un parte de daños propios por 1000 euros, la aseguradora sólo nos cubriría 700 euros, debiendo afrontar nosotros el importe de la franquicia.

Recuerda que si un seguro a todo riesgo de coche no tiene franquicia, la prima será más alta.


 

David
Author: David

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